“Lo más importante para nosotros era su seguridad y que se mantuvieran en nuestras instalaciones hasta que pudiéramos reparar el auto y el tiempo mejorara”, señaló Cristian.
Nuestra “Mejor historia de minería” es sobre un rescate después de que unos turistas quedaran varados cuando su vehículo se averió cerca de La Coipa. Cristian Machuca, Jefe de Servicios Generales de La Coipa, estuvo allí ese día para ayudar a rescatar a los turistas y compartió su historia con nosotros:
“Sucedió en septiembre pasado, cuando dos turistas argentinos, Francisco Javier del Villar y Mario Juri, recorrían Chile en auto. Su intención era llegar a Tongoy, un pueblo costero que se encuentra a diez horas en auto desde el sitio, cuando un terremoto y posterior maremoto asolaron la región de Coquimbo.
Los pasos fronterizos fueron cerrados debido a la emergencia y los dos turistas se vieron obligados a tomar un largo desvío que los llevó a La Coipa. Sin embargo, su vehículo sufrió una falla mecánica y quedaron varados justo en medio de las montañas, a 3,500 metros sobre el nivel del mar y a una temperatura de -16° grados. Esta es un área muy remota donde no hay comercios y mucho menos, talleres mecánicos. Ellos necesitaban un poco de ayuda para reparar su auto o estarían en graves problemas.
Ese día en La Coipa, Dalibor Ataglich, Gerente de Residencia, y yo estábamos trabajando en el campamento. En el puesto de control del sitio, nos avisaron que un vehículo estaba varado a aproximadamente cinco kilómetros de nosotros. Inmediatamente nos pusimos en marcha para buscarlos y ayudarles.
Llegamos a donde se encontraban a las 6 p.m., después de que llevaban horas varados, justo a tiempo antes de que empezara a oscurecer. Pudimos enganchar el vehículo a una de nuestras máquinas y remolcarlo hasta el sitio. Queríamos asegurarnos de que estuvieran cómodos, por lo que les ofrecimos una habitación y comida en el campamento. Mientras tanto, nos dedicamos a reparar su auto lo más rápido posible. Los turistas se quedaron con nosotros tres días hasta que el paso fronterizo se volvió a abrir para que terminaran su viaje.
Cuando llegaron a su patria, Francisco Javier y Mario nos enviaron una carta de agradecimiento: “Sin la ayuda de Kinross, solo Dios sabe lo que habría sido de nosotros. Gracias, hermanos chilenos. Ustedes son un verdadero ejemplo.”
Atesoraré para siempre esa carta. Ellos se mostraron muy agradecidos y para nosotros, fue un placer ayudarles”.
Cristian Machuca, Jefe de Servicios Generales de La Coipa, y Dalibor Ataglich, Gerente de Residencia, con los dos turistas argentinos, Francisco Javier del Villar y Mario Juri
¡Pulgares arriba! Francisco Javier y Mario en La Coipa