ORO
Malvina Tyurina, Gerente de Almacenamiento de Explosivos, Dvoinoye
El profundo deseo de Malvina de velar por la seguridad de las personas se remonta a sus valientes esfuerzos tras el peor accidente en una planta de energía nuclear de la historia, ocurrido en Chernobyl en 1986. Arriesgó su vida para ayudar a salvar a cientos de niños de la planta de energía nuclear de Chernobyl ubicada en el norte de Ucrania después de su explosión y de la liberación de material radiactivo a la atmósfera.
Sabiendo que se arriesgaría a estar expuesta a los materiales peligrosos, Malvina de todos modos trabajó dos turnos durante veinte días para salvar a los niños. Malvina dijo que: “lavaban a los niños para quitarles el polvo de la radiación y los llevaban al hospital más cercano en autobuses”.
Solo seis de las otras veintidós personas que ayudaron con los esfuerzos de rescate siguen con vida después de la extrema exposición a la radiación.
Después de este hecho que le cambió la vida, Malvina volvió a Magadan, su ciudad natal, y buscó una forma de incorporar la seguridad en su carrera. En 2003, Malvina ingresó en la cercana facultad de minería Susuman Mining School para obtener un título en manejo de explosivos.
Desde que ingresó en Kinross en 2012 como Gerente de Almacenamiento de Explosivos, Malvina ha encontrado su vocación y comparte a diario su dedicación a la seguridad. Se asegura de que los explosivos se usen y almacenen de una forma segura y todos los días elabora informes de seguimiento de los materiales presentes en el sitio. Es una industria altamente controlada y regulada que exige que Malvina presente informes detallados al Ministerio de Defensa ruso. Atención a los detalles y
Malvina tiene cinco hijos y dos nietos, con uno más en camino.
Es la definición del altruismo y es fácil ver por qué los colegas de Malvina y las personas que la nominaron la describen como “extraordinaria”.
Malvina Tyurina, Gerente de Almacenamiento de Explosivos, Dvoinoye
Malvina con su familia