Mohamed Salem Soueilem, Superintendente de Seguridad en Tasiast, comparte una historia que nos recuerda la importancia de acatar las normas y procedimientos de seguridad. Antes de incorporarse a Tasiast en 2011, Mohamed trabajó como director de seguridad para una empresa de perforaciones externa en el sitio. Nos cuenta una historia que vivió en su cargo anterior:
“En aquel entonces, efectuaba revisiones de seguridad de rutina en las perforaciones. Una noche de mucho viento, mientras conducía de regreso desde el tajo, me detuve en una señal de alto, igual que siempre. Me detuve por completo, miré rápidamente hacia la izquierda, luego hacia la derecha y ya me disponía a pisar el acelerador.
Una milésima de segundo antes de poner el pie en el pedal, un camión de acarreo gigantesco pasó a exceso de velocidad por la intersección.
Después de que pasó, me quedé quieto por un rato. Sentí una mezcla de miedo y perplejidad. Miedo por lo que podría haber sucedido si hubiese arrancado con mucha rapidez o si solo hubiese reducido la velocidad en lugar de detener el vehículo por completo, pues el camión venía muy cerca. En ese caso, no estaría contando esta historia.
Recuerdo esa ocasión con frecuencia. Fue una noche en que me di cuenta de que, cuando hablamos de seguridad, una milésima de segundo puede marcar una gran diferencia entre la vida y la muerte. Una vez más confirmó que respetar las normas de tránsito y tomarse el tiempo necesario en vez de conducir apurado puede ayudar a mantenernos a salvo”.
Mohamed Salem Soueilem, Superintendente de Seguridad de Tasiast